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Misión Humanitaria a Juradó demandan Autoridades Indígenas ante desplazamiento masivo por enfrentamientos armados en sus territorios.

Varias comunidades están ‘secuestradas’ por actores armados.

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Más de mil 500 indígenas desplazados en la comunidad de Dos Bocas, a dos horas de Juradó.

Varias comunidades están ‘secuestradas’ por actores armados.

La ONIC denuncia y alerta a la comunidad Nacional e Internacional, al estado Colombiano, la crítica situación que desde la semana pasada y más concretamente desde el 23 de abril viene padeciendo indígenas Embera y Wounaan en Juradó Chocó.

La crítica situación se complejiza en la medida que se extiende a todas comunidades de los resguardos de Juradó y Nussi Purru, cuya población pasa de las 2 mil personas.

De acuerdo a denuncias de las Autoridades Indígenas de la zona, así como del Personero del municipio de Juradó, y las Autoridades Indígenas de la Mesa permanente de diálogo y concertación de los Pueblos Indígenas del Chocó, ante enfrentamientos de actores armados en sus territorios cientos de indígenas Emberas y Wounaan de los resguardos de Juradó y Nussi Purru se ven obligados a desplazarse de sus comunidades hasta la comunidad indígena de Dos Bocas, como punto de refugio interno, a donde han llegado ya, más de mil 500 indígenas tratando de salvaguardas sus vidas por el conflicto armado.

“La tarde de este viernes 26 de abril, las comunidades indígenas de Bongo, Pichindé, Eyasake, Cedral, Victoria y Punto Caimito del municipio de Juradó en el departamento del Choco, debido al recrudecimiento de los hostigamientos, presencia y enfrentamientos entre paramilitares autodenominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia – AGC y guerrilla Ejército de Liberación Nacional – ELN, se desplazaron masivamente a la comunidad indígena de Dos Bocas, pernotando en la sede principal del colegio Agroambiental Armando Achito Lubiasa”, así de denuncio esta tarde el Gobierno Ancestral – Autoridad Tradicional del Departamento del Chocó y la Personería de Juradó.

Igual alertan las Autoridades locales “que las comunidades más lejos como Buena Vista, Santa Teresita y Jumara Karrá están aún confinadas, es decir atrapadas en sus propios territorios sin poder tener la posibilidad de salir a salvaguardar sus vidas.

Todas las comunidades están padeciendo crisis alimentaria, con ello riesgo a la salud e integridad física en general”.

Clamamos al unísono al Estado Colombiano, garantizar la integridad física, moral y cultural de la población indígena de Juradó; garantizar la protección del territorio de las comunidades y sus bienes colectivos e individuales; realizar urgentemente una Misión humanitaria al territorio; suministro URGENTE de Alimentos; realizar una brigada de salud urgente a la comunidad de Dos Boca sitio de recepción de la población desplazada; facilitar los materiales para la instalación de casetas, ya que por el número de habitantes no hay donde albergar toda la gente del desplazamiento masivo; proveer colchonetas, plásticos, carpas, kit de aseo, kit de cocina y demás utensilios necesarios para mitigar la situación de precariedad en la que se encuentra la población indígena de Juradó; suministrar combustible – Gasolina ligada para el transporte, aceite de liga y ACPM para la planta eléctrica; adecuación de agua potable y tanques para el almacenamiento de agua; Adecuación provisional de aulas de clase para la atención de la población estudiantil víctima de desplazamiento forzado.

Por tanto, demandamos al Gobierno Nacional, Departamental y Municipal, órganos de control, para que de manera articulada con las Autoridades Indígenas de la región y departamental, y con carácter de SOS – urgente accionen sus mecanismos de ayuda Humanitaria y se brinde la atención pertinente a todas las familias indígenas en extremo riesgo de sus vidas y la libre movilidad en sus territorios de origen.

Urge necesidad del Comité Territorial y Nacional de Justicia Transicional (CTJT) con el propósito de buscar los mecanismos necesarios para mitigar urgentemente está vulneración de Derechos Constitucionales Fundamentales.

Antecedentes:

Las comunidades que registran desplazamiento interno son: las Embera de Cedral, El Bongo, Eyazaque, Pichinde, Dosbocas, Caimito, La Victoria, Buena Vista, Jumara Carra, y las comunidades Wounaan de Santa Teresita, Dichaar Di y Santa Marta de Curiche, ubicadas en el municipio de Juradó Chocó. Quienes, en medio del fuego cruzado en sus territorios, arriesgan sus vidas por las balas, así como por la inseguridad alimentaria y de salud, ante el confinamiento y amenaza en sus territorios.

No conformes con exponer sus vidas, el pasado 25 de abril, integrantes de Autodefensas Gaitanistas de Colombia – AGC, saquearon la comunidad, robándose los animales domésticos, así como también otros alimentos, que son el sustento diario, dejando a las comunidades sin ningún tipo de abastecimiento, acrecentando de esta manera la problemática sobre todo en niños y adultos mayores.

Se denuncia que desde el pasado martes 23 de abril las autodenominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia – AGC, se instalaron en la Comunidad de Cedral, usando de escudo humano a la población, en clara violación al DIH; fue el caso cuando la noche del 24 de abril hubo enfrentamientos con el ELN, causando pánico y temor entre las 86 familias que conforman dicha comunidad, por fortuna este hecho no produjo víctimas, pero si obligó a que las clases de los estudiantes, del Centro Educativo Indígena Ogo Puru, fueran suspendidas por temor a que esto se repita en cualquier momento y pueda presentar mayor riesgo a la vida de los menores.

Poco a poco huyendo de las confrontaciones armadas a la Comunidad el Cedral han llegado decenas de indígenas de la comunidad El Bongo, lo que incrementa la crisis humanitaria.

Las comunidades Indígenas alertan sobre las amenazas a líderes indígenas que se encuentran en la zona y afirman que si estos grupos armados ilegales, no se van del territorio y no respetan la Autonomía y vida de las Comunidades, la próxima acción será un inminente desplazamiento masivo, que implicaría más de 2 mil personas, incluso exponiendo sus vidas al máximo ante la amenaza que no les permitirán la salida de sus territorios.

De modo, que se re victimizan las comunidades, prácticamente secuestradas en sus propios territorios y siendo escudos humanos de la guerra.

Esta crítica situación se suma a la que viven más de 7.000 personas que están confinadas en Riosucio, Carmen del Darién, Bojayá y Bahía Solano.

Al Gobierno Nacional, a través de sus entidades correspondientes, hacer seguimiento a los líderes amenazados y brindar acciones reales y contundentes que salvaguarden su vida.

A las ONG de DDHH y organismos internacionales de defensa de los DDHH para que brinden acompañamiento a las comunidades que se encuentran en confinamiento y sirvan de garantes ante las acciones que ejecuten las instituciones gubernamentales, en defensa del derecho a la vida dentro del territorio ancestral.

Comunica ONIC, Personería de Juradó – Chocó.

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