Por: Alter Onesis Mosquera.
La semana pasada el Alcalde de Cali, en una ceremonia llena de simbolismos le entregó a nombre del municipio de la capital del pacifico, del Concejo Local y de la Academia de Historia, la medalla de la orden Independencia en Grado de Caballero, al Maestro Alexis Lozano Murillo, por dejar en alto el nombre de la ciudad en el Mundo.
Este reconocimiento se suma a la Gran Orden del Mérito Cultural otorgada por el Ministerio de Cultura hace varios años.
A finales del mes de mayo de la presente anualidad en Madrid, España, autoridades locales le pusieron a una calle el nombre de “Calle Guayacán Orquesta”, ubicada en honor a la reconocida orquesta colombiana nacida en Bogotá.
Este homenaje se realizó en un acto oficial en la capital española, destacando el impacto cultural de la agrupación y el vínculo entre España y Colombia a través de la música.
Guayacán es la agrupación fundada y dirigida por Lozano, que vio a la luz su primer álbum en1986 “Llegó la hora de la verdad” Con canciones que marcaron su historia como “Juana Blandón”, “Tócame la Clave” y “Vas a Llorar”, 4 años después que el hijo de Cecilio y Consolación dejara el Grupo Niche donde fue arreglista y Codirector Junto a Jairo Varela Martínez, en los primeros trabajos discográficos del grupo.
Alexis Lozano Murillo (nació en Quibdó – Chocó, un 10 de julio de 1958, está cumpliendo 67 años hoy) es uno de los alumnos aventajados del Sacerdote español Isaac Rodríguez, quien llegó a Quibdó en 1935, es para algunos un hombre, altivo y frentero que no traga entero, pero es sin duda un músico, virtuoso, excelso, un músico total, pocos se pueden compararse con él, ejecuta con gran talento casi todos los instrumentos, es compositor de canciones como “Extraño tu Amor”, “Rumba Para Enamorar” el reciente éxito de su orquesta a ritmo de Charranga, “Como Una Madre” entre otras que grabó con Guayacán, pero también canta y lo hace con envidiable afinación a pesar de no tener una gran voz, es arreglista y productor donde saca una gran ventaja por su conocimiento integral para mezclar los sonidos y notas musicales, de allí la fusión que hizo entre la salsa y el Bolero en la canción “Cuanto te Amo Cuanto te Quiero” del álbum Marcando la Diferencia en 1994 con la voz de Charli Zaa, “Amor Traicionero” Salsa y Vallenato en 1992 en la voz de Carlos Brito donde hay un solo de Acordeón del ya fallecido Juancho Rois.
Que decir de la canción “Chica de Cartel” grabada en 1997 donde fusiona sonidos urbanos, como el máximo exponente de la música del pacifico.
Míster Alexis también puso su sello como productor y arreglista exitoso del álbum Saboreo Volumen 4 donde se destaca la “Vamo a Tumbá” de Octavio Panesso publicado en el año 2000, la canción de Chirimía más escuchada en el planeta. Con Zully Murillo hizo “Cuentos Cantados y Contados” editado en 2007, donde aparecen canciones como “La Banda”, “Miedo en el Monte” y “Salen los Espantos”, hizo el álbum Esencia de Currulao, homenaje a Petronio Álvarez donde cantó “El Porteñito”, “Teresa”, “Mi Buenaventura” y “Coja la Pareja” entre otras canciones, producción que sirvió para darle vida al Festival Petronio Álvarez.
Por eso y por otras producciones con “La Máquina” de Alexis y Sonidos del Pacifico, Mi Música Mis Raíces, con las voces de Goyo, Willy García, Jimmy Saa, Elvis Magno y Nidia Góngora, no se puede hablar de la Salsa colombiana y de la música del Pacifico sin hablar del “Hombre Orquesta” Alexis Lozano Murillo, quien sigue vigente llevando música y alegría con la orquesta Guayacán con su “que que que que” frase que usa la agrupación para referirse al momento en que Jairo Varela tartamudeo al escuchar que Alexis se retiraba de Niche, luego que empezaba a disminuir su influencia en el grupo para comenzar su camino con su propia historia con la Orquesta madera de Colombia, junto a Israel Tanenbaum, pianista, productor y arreglista, Richie Valdés (voz) y sus hermanos William (timbales) Julio César Valdés (bajo) y otros talentosos músicos.
El Chocó le debe un homenaje en vida al maestro Alexis Lozano Murillo, también a figuras como Hansel Camacho Santos, Octavio Panesso y Richie Valdés, no hay que esperar a que ya no estén dada su contribución a la música y al folklor, como dicen del Chocó para el resto del Mundo.