Gobierno y “clan del Golfo” instalan los dos primeros grupos de trabajo para desescalar la violencia en Chocó, como parte de los acuerdos de Doha.

Gobierno y “clan del Golfo” instalan los dos primeros grupos de trabajo para desescalar la violencia en Chocó, como parte de los acuerdos de Doha.

El 5 y 6 de noviembre se instalaron en Acandí y Riosucio los grupos de trabajo municipales con miras a articular acciones para transformar territorio.

Por: Juan Pablo Penagos Ramírez / Periodista El Tiempo.

Acandí y Riosucio, municipios del Chocó, el Gobierno colombiano y el autodenominado Ejército Gaitanista de Colombia (EGC, también conocido como ‘clan del Golfo’) instalaron los dos primeros grupos de trabajo municipales para la transformación territorial y el desescalamiento de las violencias, en cumplimiento de lo acordado el pasado mes de septiembre en Doha (Catar).

De este grupo hacen parte representantes de organizaciones campesinas, mujeres, comunidad LGBTIQ+, empresarios, indígenas, comunidades negras, población con discapacidad, comunicadores locales, sectores como cultura y deporte y autoridades territoriales, que seguirán y articularán acciones para el incumplimiento de los acuerdos alcanzados en este proceso sociojurídico.

Trabajarán en articulación con las delegaciones del Gobierno Nacional y el (a)EGC e instituciones del orden nacional como el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, la Dirección de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito, el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) y los ministerios de Agricultura, Educación y Ambiente, en la puesta en marcha de acciones que permitan que en estos municipios, históricamente excluidos, “se consolide plenamente el Estado Social de Derecho y con este todas las oportunidades que las comunidades necesitan para la superación de las violencias”.

Al respecto, Águeda Plata, delegada del Gobierno Nacional en el proceso con el (a) EGC resaltó que los grupos de trabajo “son equipos participativos con toda la fuerza plural de los territorios para dinamizar el cumplimiento del acuerdo de Doha”.

La delegada destacó además que “la gente está dispuesta, tiene voluntad; la gente quiere la paz y vivir tranquila, está expectante frente a todo lo que esto significa y todo lo nuevo que trae este proceso”.

Luis Armando Pérez Castañeda, alias Bruno (izq) estuvo presente. Foto: Consejería Comisionada de Paz.

Con el reloj electoral en contra y sin un marco jurídico definido para el sometimiento, el 18 de septiembre de 2025, en Doha (Qatar), el Gobierno colombiano y el ‘clan del Golfo’ -considerado el grupo criminal más grande y con mayor dominio territorial en Colombia- dieron inicio formal al proceso de conversaciones sociojurídicas.

Álvaro Jiménez, jefe de la delegación del Gobierno y mano derecha del comisionado Otty Patiño, se reunió con Luis Armando Pérez Castañeda, alias Bruno, bajo la mirada de un funcionario del ministerio de Exteriores catarí.

La iniciativa quedó consignada en un documento de dos páginas y contempla como área piloto cinco municipios: Mutatá (Antioquia), Acandí, Belén de Bajirá, Riosucio y Unguía (Chocó). En estos territorios se desarrollará la fase de consolidación de confianza con énfasis en la protección de derechos de la niñez y la adolescencia.

La hoja de ruta también establece la creación de un programa de sustitución voluntaria de cultivos ilícitos en los cinco municipios, con apoyo técnico y alternativas productivas.

“El éxito está lejos de asegurarse. La firma en Doha no basta: lo decisivo será la capacidad estatal para materializar lo pactado, la verificación independiente y la voluntad real del EGC de transformar sus prácticas de control armado (dictadura local) y economías ilegales”, señaló el director del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, Leonardo González.