¡Llegó la cosecha de Bija!

Dos años después del establecimiento de cultivos de achiote y del acompañamiento a los mismos con asistencia técnica por parte del Programa Oro Legal de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), comenzaron a darse los primeros resultados: de las 579 hectáreas sembradas hasta el momento, el 25 % de ellas entraron a su fase de maduración.

Según Miguel Molano, subdirector del Programa, “se espera que al término de la cosecha de este mes los productores recolecten 150 toneladas de cápsula y en la cosecha de octubre tripliquen esta cifra. Tenemos la expectativa que cuando todos los cultivos estabilicen su producción se alcancen las 5.000 toneladas anuales”.

Un cultivo para diversificar la economía.

El desarrollo semi industrial de la “bija” como se conoce este cultivo en el departamento del Chocó nació como una iniciativa de diversificación económica dirigida a familias que durante años han vivido de la minería de subsistencia o que están vinculadas a eslabones muy débiles de la cadena de valor de la minería de oro, y que, por circunstancias de orden legal o ambiental, no deben ni pueden seguir realizando actividades mineras.

“Tenemos como meta dejar establecidas 670 hectáreas de achiote en los consejos comunitarios: Mayor de Villa Conto, Mayor de San Isidro, Boca de Tanando y Cocomopoca, y garantizar la sostenibilidad de las siembras a través de una proyección de un modelo de negocio y una logística de comercialización que beneficie a 335 familias productoras y para eso vamos a instalar y poner en funcionamiento una planta procesadora con la que estimamos transformar 1.500 toneladas de semilla fresca y producir unas 100 toneladas de bixina en pasta al año” concluyó Miguel Molano, subdirector del Programa Oro Legal de USAID.

Usos del achiote.

El achiote es un colorante natural, que se extrae de la semilla del árbol, cuyo nombre científico es Bixa Orellana, fuente natural del pigmento conocido como Annato. La Bixina y Norbixina son sus componentes básicos que tienen una gran demanda en la industria de alimentos, para darle color a productos como: quesos, margarinas, salsas, aceites de cocina, carnes, lácteos, entre otros. También se utiliza en la industria cosmética, textil y farmacéutica. La tendencia mundial se orienta al consumo de productos naturales sin conservantes ni colorantes artificiales, panorama que representa una gran oportunidad para este cultivo en el Chocó.