Monitoreo de los recursos hidrobiológicos, acción esencial para la conservación.

Durante 14 años se han adelantado labores de monitoreo pesquero en el Parque Nacional Natural Utría como acción efectiva para controlar las amenazas de las especies que son valor objeto de conservación y la preservación de los ecosistemas.

En la Costa Chocoana del Pacífico Colombiano se encuentra el Parque Nacional Natural Utría, un área protegida que cuenta con un extenso ecosistema de selva húmeda tropical y ecosistemas marino costeros, acompañada de su inmensa diversidad de fauna y flora. Allí, el monitoreo de recursos pesqueros se ha convertido en una de las fortalezas del Parque Nacional, proceso que se desarrolla gracias al trabajo articulado con las comunidades y es liderado por el equipo de guardaparques en el área. Esto ha traído consigo múltiples beneficios para los ecosistemas existentes, brindando información para el manejo de las especies que son valor objeto de conservación, la preservación de los ecosistemas hídricos y la supervivencia de las comunidades de pescadores artesanales que conviven en el territorio.

Este proceso se desarrolla en el área protegida desde el 2006, a través de la implementación de la metodología del Sistema de Información Pesquera del INVEMAR (SIPEIN), una plataforma donde se ingresa la información recolectada en torno a las capturas de los recursos pesqueros en dos sitios de desembarco en  la zona de influencia del área: la comunidad del corregimiento de Jurubirá, perteneciente al Municipio de Nuquí y la comunidad del corregimiento del Valle, perteneciente al municipio de Bahía Solano. Con estas dos comunidades se mantienen trabajos de manera permanente y mancomunada a través de acuerdos de uso y manejo, además de la articulación en programas de ordenamiento regional sostenible de los recursos hidrobiológicos y pesqueros.

Por otro lado, la información se recoge a través del apoyo del personal en el área protegida. En cada punto de desembarco hay un colector de la comunidad que va tomando los datos. Tres veces por semana se monitorea la captura por unidad de esfuerzo (CPUE), lo que permite medir la abundancia relativa de cada especie; y dos veces por semana, las tallas de las especies capturadas, lo que permite determinar si las especies están siendo capturadas por debajo de la talla media de madurez sexual y estarían en peligro o no.

Este ejercicio sistemático que se desarrolla desde hace 14 años, facilita tener la información técnica y realizar el análisis que permita caracterizar las faenas de pesca artesanal, como se vienen desarrollado, como se da la dinámica de pesca en el área permitida del parque. Todo lo anterior permite determinar la presión de las especies y actuar de manera articulada y eficaz dentro del Parque Nacional y en articulación con otras instituciones que también toman acciones de ordenamiento pesquero, que permitan proteger el área cuando no se están cumpliendo los compromisos de los acuerdos con las comunidades y tomar las medidas de manejo pertinentes de manera concertada con dichas comunidades.